lunes, 13 de diciembre de 2010

Breve



La Coherencia de Paula


Paula es mi nieta. Y, como suele suceder con los peques, a veces hace y dice cosas que nos hacen reflexionar a los mayores. El último de sus comentarios es un auténtico regalo que, además, me ha permitido conocerla un poco más.

M: Oye Paula, dentro de poco tienes que empezar a escribir la carta a los Reyes Magos.
P: Si, ya lo sé.
M: ¿Qué les vas a pedir este año?
P: Les voy a decir que me he portado bien y que saco mejores notas en matemáticas.
M. Ya. Pero, ¿qué les vas a pedir?
P: Nada.
M: ¿Cómo que nada?
P: Jopé yaya, pedirles regalos a los Reyes Magos no tiene ninguna gracia porque ya se lo que me van a traer y si luego no me lo traen, pues encima a lo mejor me enfado. Lo mejor es que me den la sorpresa. ¿A ti te gustan las sorpresas, verdad?

Sin palabras.

En esta época en la que nos ha tocado vivir en la que prima el “tener” antes que el “ser”, el argumento de Paula, me sonó a pura coherencia. Y una liberación. La palabra “regalo”, al menos para ella, conserva intacta todas sus esencias y dichas “esencias” no pasan por tener que seguir un guión pre-establecido, que además nos cuesta a los padres y abuelos una pasta. Por lo que se ve, a Paula lo que le gustan son las sorpresas, de manera que poco o nada parece importarle el bombardeo de anuncios de juguetes de la tele, carísimos todos ellos que se agotan en un suspiro como no espabiles y te des prisa en comprarlos.

Pues qué queréis que os diga. Bien por la peque. De momento, al menos, a ella no la lleva de la brida esta sociedad consumista que nos ha tocado vivir.

Como apunte final a este breve intimista, y porque me confieso una impenitente clásica, aquí va una lista de literatura infantil tradicional, de esa que a través de cuentos e historias infantiles promueve todo aquello que a la ex-ministra Aído la pone tan nerviosa y que llamamos valores. No sería un mal regalo para los peques y, de paso, su lectura tampoco nos vendría mal a los mayores. Un soplo de aire fresco, tal vez, para tomarnos un respiro en momentos tan agobiantes y estresantes por los que tantos estamos pasando.

No solo de materialismo vive el hombre.
 

  1. Cuento de Navidad – Charles Dickens.
  2. El cascanueces – Ernst Theodor Amadeus Hoffmann.
  3. Cuentos de Andersen – Hans Christian Andersen.
  4. Cartas de Papá Noel – J.R.R. Tolkien.
  5. Rumpelstiltzkin – Hermanos Grimm.
  6. El Soldadito de Plomo – Hans Christian Andersen.
  7. Hansel y Grettel – Hermanos Grimm.
  8. El Gigante Egoísta – Oscar Wilde.
  9. La reina de las nieves – Carmen Martín Gaite.
  10. El Premio Gordo – Blasco Ibáñez.



2 comentarios:

  1. peTú nieta si que sabe.... ahora que, de tal palo tal astilla, de lo que se vé se aprende.

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  2. Paula dice que pedir regalos a los Reyes no tiene gracia porque le gusta más que le den una sorpresa. Lo que tedríamos que aprender chicos y grandes de esa manera de entender la Fiesta de Reyes

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